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Tenis David Nalbandian / El regreso
Confianza plena. A pocos días de su retorno a las canchas, David Nalbandian confía en volver al primer nivel mundial y a encarar la última etapa de su carrera “apuntando a cosas importantes”.
Fabián Sacarelli
De nuestra Redacción
fsacarelli@lavozdelinterior.com.ar
Pasaron los seis meses de rehabilitación por la operación en su cadera y David Nalbandian está casi listo para el regreso. Es un momento especial, porque sabe que cuando vuelva a pisar la cancha será para iniciar la última etapa de su carrera profesional. Por eso mismo quiere volver, y lo mejor posible, aunque guarde en la intimidad ese margen de duda lógico de aquel que encara un nuevo desafío en la madurez. "Sé que no me quedan demasiados años, y les tengo que apuntar fuerte a estos dos que me quedan", afirma.
–¿Cómo vas a plantear tus objetivos?
–Primero quiero ver cómo arranco para saber a qué apunto. Creo que voy a estar bien como para apuntar a cosas importantes, después si puedo o no, si gano o pierdo, es otro tema. Me quedan dos años buenos para aprovecharlos y todavía estoy en plenitud. Después, a los 32, es más difícil. ¿Cuánto voy a poder? Recién lo sabré en mayo. Si estoy ciento por ciento me animo a todo, si estoy en un 60 por ciento sé que hay ciertas cosas que no voy a poder. Pero creo que voy a estar bien para aspirar a un Másters 1000 o a un Grand Slam.
–Por lo que decís, tus metas son ambiciosas.
–Si no tenés motivación es difícil viajar, arrancar y entrenarte. Pasa mucho por ponerte metas y entrenarte "para algo". No voy a entrenarme para irme de vacaciones, sino para ganar.
–Sobre todo en un circuito exigente y estresante.
–Te vas acostumbrando. El tenis te mete en una vorágine muy rara, muy loca, pero te vas acostumbrando a viajar, a estar solo, a extrañar. Llega un momento en que no sabés en qué ciudad del mundo estás.
–¿Y los rivales?
–Hubo jugadores que eran durísimos. Para mí (Marat) Safin, cuando estaba bien, era de los mejores lejos. Cuando te tocaba un tipo así sabías que ibas a tener que correr, sufrir y transpirar el doble de lo que te cuesta cualquier otro rival. Incluso jugando bien podías perder.
–Pero a vos te ha ido bien contra los Safin, Federer, Nadal...
–Esos son los partidos lindos porque te preparás y te entrenás para eso. Temor le puede dar a un tipo 500 del ranking y entrar de golpe a un partido de esos, pero yo, que vengo jugando hace años ahí arriba, es como que ves a los otros venir. No te sorprende jugar contra Federer o "Rafa", y son los partidos lindos para jugar y para ganar.
Semestre sabático
Desde que David salió del quirófano pasaron seis meses, y los aprovechó bien. "Los pasé con mi familia, mi novia, mis amigos, organizando fines de semana. Me fui a pescar, vi Argentina-Brasil en Rosario, aproveché para hacer cosas que cuando estás afuera jugando anhelás estar en casa tranquilo", afirma.
–Como ver el rally Gran Premio Unquillo-La Falda, por ejemplo.
–Voy a estar en el rally (el próximo fin de semana). Me tenté con hacer algo más pero estoy complicado con el tiempo. Los autos siempre me han gustado y siempre me van a gustar por la adrenalina que generan.
–Si hubieses tenido que optar entre ser tenista y ser piloto, ¿qué elegías?
–Hay que estar en el momento. En el automovilismo tenés que poner mucha plata siempre. Me encanta, pero me gusta más el rally, que es la parte pobre del automovilismo, y es más difícil llegar a ganarte la vida.
–¿Sos bueno jugando al fútbol?
–Juego, me defiendo (risas).
–¿Algún otro deporte pendiente?
–Tirarme en paracaídas, algún día lo voy a intentar.
–¿Cómo creés que te ve la gente?
–Creo que la gente me respeta y le gusta la forma de jugar que tengo. Casi todos a los que les gusta el tenis me dicen lo mismo: "Cómo ves la cancha, cómo armás la jugada". Creo que a través de eso logro el respeto y la admiración que por ahí con otros jugadores cuesta más. Lo mío pasa por ese lado.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570947
El próximo 12 y 13 de diciembre, David volverá a jugar un partido después de seis meses y medio. Será en San Juan, donde participará en una exhibición con Guillermo Cañas, Gastón Gaudio y el chileno Nicolás Massú. Pero, ¿cómo llega?
"Todos nos preguntamos lo mismo (risas). Cada vez estoy entrenándome más fuerte, con más intensidad, y estoy empezando a tener los dolores musculares típicos de pretemporada porque hace cuatro meses o cinco que estoy fuera de la actividad. Pero son dolores musculares, no de la cadera, así que estoy bien", asegura.
Esta semana comenzará a jugar algunos puntos, y la semana próxima estará en Buenos Aires para comenzar a entrenarse con normalidad. "Esta semana estamos apretando y luego haremos una pretemporada de mes y medio larga, linda. Los primeros días de enero estamos viajando a Auckland", agrega.
Será en el torneo neozelandés en donde volverá a competir por los puntos ATP, y tendrá un margen de tres o cuatro meses para saber realmente hasta dónde puede aspirar.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570947
¿No va más? David tuvo etapas en las que eligió estar solo y obtuvo su logro más importante ante Federer, que tampoco tenía coach. Hoy, en la vuelta al ruedo, le dio continuidad a Luis Lobo.
Hugo García
De nuestra Redacción
hgarcia@lavozdelinterior.com.ar
¿El entrenador es necesario? David Nalbandian aceptó opinar sobre esta dicotomía tenística y dijo que es relativo. Él mismo es un ejemplo andante. Ayer reconoció que le fue bien y mal. Hoy, para jugarse el todo por el todo en su reaparición, comentó que le dará continuidad a Luis Lobo. Antes pasó períodos en los que fue su propio entrenador, como cuando ganó la Master Cup 2005 en Shangai (China), nada menos que frente a Roger Federer.
–¿Mantendrás un DT?
–Sí, con Martín Jaite pasó que no tenía más ganas de viajar, esa es la realidad. Creo que Lobo es un muy buen entrenador y lo conozco desde que era jugador. Tenemos una excelente relación, y como entrenador fue mejorando desde que agarró a Marcelo "Chino" Ríos. Después lo tuvo a Carlos Moyá. La idea es tener continuidad.
–¿En qué te fijás a la hora de elegir un entrenador?
–En todo. Es difícil porque te tenés que llevar bien. Tiene que ser bueno adentro y afuera.
–¿Y estratégicamente?
–Por ejemplo Federer está solo. Pero eso es muy personal. Hay muchos jugadores que necesitan que el entrenador les diga qué hacer en cada punto. Hay otros que se acostumbran a jugar más solos y a decidir. Está en cada uno. Tuve etapas en las que pensé en que un entrenador era importante y otras, en las que pensé que no. En las dos me fue bien y mal. No es que por tener un entrenador me fue mucho mejor que cuando no tuve a nadie. Cuando gané el Master, no tenía entrenador. Es muy relativo.
–Tu lectura del rival es determinante e intransferible.…
–Por eso. Es relativo y personal de cada uno. Federer demostró que no hace falta un entrenador. Y a lo mejor Nadal lo necesita por el estilo de juego que tiene. También pasa por las etapas.
–¿Cuánto de compinche y cuánto de autoridad debe tener tu DT?
–Es una mezcla. Los extremos no son buenos. Ni que sea tu mejor amigo para no entrenar, ni que sea un "mandatario" para no poder hablar de otra cosa que no sea el entrenamiento. Con los años sabe cuándo te tenés que poner serio para entrenarte y en qué momento podés boludear dos minutos en el entrenamiento. Es muy personal todo eso. Cada relación jugador-entrenador es distinta. Aunque sea el mismo DT para cinco jugadores. A mí me gusta entrenarme de una forma, a "Pico" Mónaco de otra, a Del Potro y a Acasuso de otra. El entrenador se tiene que adaptar a la necesidad del jugador. No a todos se los entrena igual.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570945
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“Si estoy ciento por ciento, me animo a todo”
Confianza plena. A pocos días de su retorno a las canchas, David Nalbandian confía en volver al primer nivel mundial y a encarar la última etapa de su carrera “apuntando a cosas importantes”.
Fabián Sacarelli
De nuestra Redacción
fsacarelli@lavozdelinterior.com.ar
Pasaron los seis meses de rehabilitación por la operación en su cadera y David Nalbandian está casi listo para el regreso. Es un momento especial, porque sabe que cuando vuelva a pisar la cancha será para iniciar la última etapa de su carrera profesional. Por eso mismo quiere volver, y lo mejor posible, aunque guarde en la intimidad ese margen de duda lógico de aquel que encara un nuevo desafío en la madurez. "Sé que no me quedan demasiados años, y les tengo que apuntar fuerte a estos dos que me quedan", afirma.
–¿Cómo vas a plantear tus objetivos?
–Primero quiero ver cómo arranco para saber a qué apunto. Creo que voy a estar bien como para apuntar a cosas importantes, después si puedo o no, si gano o pierdo, es otro tema. Me quedan dos años buenos para aprovecharlos y todavía estoy en plenitud. Después, a los 32, es más difícil. ¿Cuánto voy a poder? Recién lo sabré en mayo. Si estoy ciento por ciento me animo a todo, si estoy en un 60 por ciento sé que hay ciertas cosas que no voy a poder. Pero creo que voy a estar bien para aspirar a un Másters 1000 o a un Grand Slam.
–Por lo que decís, tus metas son ambiciosas.
–Si no tenés motivación es difícil viajar, arrancar y entrenarte. Pasa mucho por ponerte metas y entrenarte "para algo". No voy a entrenarme para irme de vacaciones, sino para ganar.
–Sobre todo en un circuito exigente y estresante.
–Te vas acostumbrando. El tenis te mete en una vorágine muy rara, muy loca, pero te vas acostumbrando a viajar, a estar solo, a extrañar. Llega un momento en que no sabés en qué ciudad del mundo estás.
–¿Y los rivales?
–Hubo jugadores que eran durísimos. Para mí (Marat) Safin, cuando estaba bien, era de los mejores lejos. Cuando te tocaba un tipo así sabías que ibas a tener que correr, sufrir y transpirar el doble de lo que te cuesta cualquier otro rival. Incluso jugando bien podías perder.
–Pero a vos te ha ido bien contra los Safin, Federer, Nadal...
–Esos son los partidos lindos porque te preparás y te entrenás para eso. Temor le puede dar a un tipo 500 del ranking y entrar de golpe a un partido de esos, pero yo, que vengo jugando hace años ahí arriba, es como que ves a los otros venir. No te sorprende jugar contra Federer o "Rafa", y son los partidos lindos para jugar y para ganar.
Semestre sabático
Desde que David salió del quirófano pasaron seis meses, y los aprovechó bien. "Los pasé con mi familia, mi novia, mis amigos, organizando fines de semana. Me fui a pescar, vi Argentina-Brasil en Rosario, aproveché para hacer cosas que cuando estás afuera jugando anhelás estar en casa tranquilo", afirma.
–Como ver el rally Gran Premio Unquillo-La Falda, por ejemplo.
–Voy a estar en el rally (el próximo fin de semana). Me tenté con hacer algo más pero estoy complicado con el tiempo. Los autos siempre me han gustado y siempre me van a gustar por la adrenalina que generan.
–Si hubieses tenido que optar entre ser tenista y ser piloto, ¿qué elegías?
–Hay que estar en el momento. En el automovilismo tenés que poner mucha plata siempre. Me encanta, pero me gusta más el rally, que es la parte pobre del automovilismo, y es más difícil llegar a ganarte la vida.
–¿Sos bueno jugando al fútbol?
–Juego, me defiendo (risas).
–¿Algún otro deporte pendiente?
–Tirarme en paracaídas, algún día lo voy a intentar.
–¿Cómo creés que te ve la gente?
–Creo que la gente me respeta y le gusta la forma de jugar que tengo. Casi todos a los que les gusta el tenis me dicen lo mismo: "Cómo ves la cancha, cómo armás la jugada". Creo que a través de eso logro el respeto y la admiración que por ahí con otros jugadores cuesta más. Lo mío pasa por ese lado.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570947
San Juan, el primer destino
El próximo 12 y 13 de diciembre, David volverá a jugar un partido después de seis meses y medio. Será en San Juan, donde participará en una exhibición con Guillermo Cañas, Gastón Gaudio y el chileno Nicolás Massú. Pero, ¿cómo llega?
"Todos nos preguntamos lo mismo (risas). Cada vez estoy entrenándome más fuerte, con más intensidad, y estoy empezando a tener los dolores musculares típicos de pretemporada porque hace cuatro meses o cinco que estoy fuera de la actividad. Pero son dolores musculares, no de la cadera, así que estoy bien", asegura.
Esta semana comenzará a jugar algunos puntos, y la semana próxima estará en Buenos Aires para comenzar a entrenarse con normalidad. "Esta semana estamos apretando y luego haremos una pretemporada de mes y medio larga, linda. Los primeros días de enero estamos viajando a Auckland", agrega.
Será en el torneo neozelandés en donde volverá a competir por los puntos ATP, y tendrá un margen de tres o cuatro meses para saber realmente hasta dónde puede aspirar.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570947
El jugador-entrenador
¿No va más? David tuvo etapas en las que eligió estar solo y obtuvo su logro más importante ante Federer, que tampoco tenía coach. Hoy, en la vuelta al ruedo, le dio continuidad a Luis Lobo.
Hugo García
De nuestra Redacción
hgarcia@lavozdelinterior.com.ar
¿El entrenador es necesario? David Nalbandian aceptó opinar sobre esta dicotomía tenística y dijo que es relativo. Él mismo es un ejemplo andante. Ayer reconoció que le fue bien y mal. Hoy, para jugarse el todo por el todo en su reaparición, comentó que le dará continuidad a Luis Lobo. Antes pasó períodos en los que fue su propio entrenador, como cuando ganó la Master Cup 2005 en Shangai (China), nada menos que frente a Roger Federer.
–¿Mantendrás un DT?
–Sí, con Martín Jaite pasó que no tenía más ganas de viajar, esa es la realidad. Creo que Lobo es un muy buen entrenador y lo conozco desde que era jugador. Tenemos una excelente relación, y como entrenador fue mejorando desde que agarró a Marcelo "Chino" Ríos. Después lo tuvo a Carlos Moyá. La idea es tener continuidad.
–¿En qué te fijás a la hora de elegir un entrenador?
–En todo. Es difícil porque te tenés que llevar bien. Tiene que ser bueno adentro y afuera.
–¿Y estratégicamente?
–Por ejemplo Federer está solo. Pero eso es muy personal. Hay muchos jugadores que necesitan que el entrenador les diga qué hacer en cada punto. Hay otros que se acostumbran a jugar más solos y a decidir. Está en cada uno. Tuve etapas en las que pensé en que un entrenador era importante y otras, en las que pensé que no. En las dos me fue bien y mal. No es que por tener un entrenador me fue mucho mejor que cuando no tuve a nadie. Cuando gané el Master, no tenía entrenador. Es muy relativo.
–Tu lectura del rival es determinante e intransferible.…
–Por eso. Es relativo y personal de cada uno. Federer demostró que no hace falta un entrenador. Y a lo mejor Nadal lo necesita por el estilo de juego que tiene. También pasa por las etapas.
–¿Cuánto de compinche y cuánto de autoridad debe tener tu DT?
–Es una mezcla. Los extremos no son buenos. Ni que sea tu mejor amigo para no entrenar, ni que sea un "mandatario" para no poder hablar de otra cosa que no sea el entrenamiento. Con los años sabe cuándo te tenés que poner serio para entrenarte y en qué momento podés boludear dos minutos en el entrenamiento. Es muy personal todo eso. Cada relación jugador-entrenador es distinta. Aunque sea el mismo DT para cinco jugadores. A mí me gusta entrenarme de una forma, a "Pico" Mónaco de otra, a Del Potro y a Acasuso de otra. El entrenador se tiene que adaptar a la necesidad del jugador. No a todos se los entrena igual.
Link: http://www.lavoz.com.ar/09/11/26/secciones/deportes/nota.asp?nota_id=570945
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